Cómo hacer un smokey eye paso a paso
Destaca tu mirada con el maquillaje intenso y estrella que siempre triunfa.
Son varios los tipos de maquillaje que tenemos a nuestra disposición, en función del momento. Pero de todos ellos, hay uno que siempre gana terreno y no es de extrañar. Se trata del conocido como smokey eye y es que se trata de una opción que consigue destacar la mirada, darle más profundida y hasta sensualidad o misterio a partes iguales.
Aunque nos gusta elegir el maquillaje que nos favorece en función de nuestro rostro, te diremos que el smokey eyes, será uno de los más favorecedores. Pero para ello, necesitas conocer el paso a paso de este maquillaje tan especial.
Cómo hacer un smokey eyes paso a paso de manera sencilla
Cuando vemos el resultado, podemos pensar que se trata de una técnica de maquillaje complicada. Pero nada más lejos de la realidad, sobre todo si sabemos dar los pasos correctos. Quizás al principio te lleve un poco más de tiempo, pero es algo totalmente habitual y que debes tener en cuenta. Porque gracias a la práctica, conseguiremos los resultados que tanto esperábamos. ¡Ponte manos a la obra!
Base y corrector para preparar tu piel
La preparación de la piel siempre es uno de los pasos más importantes. Recuerda que antes de comenzar a maquillarte necesitas de una buena crema hidratante. Porque si la piel está suave y perfecta, esto tendrá mucho que ver en el resultado final. No importa que sea en el resto de la cara como en los párpados, ya que estos también necesitan su doss de hidratación.
Dicho esto, pasamos a aplicar la base y con ella, el corrector. Gracias a este último, conseguiremos eliminar pequeñas imperfecciones de la zona. Recuerda que debes extenderlo tanto en el párpado móvil como en el fijo. Si lo haces de este modo, las sombras van a durar más tiempo impecables y sin necesidad de retoques. Disfumina bien la zona para poder dar el siguiente paso.
Aplica dos tonalidades de sombras
La clave del smokey eye está en la combinación de dos tonalidades de sombras: una más clara y otra más intensa u oscura. De modo que lo más habitual es elegir el color gris y dos tonalidades dentro de él. Aunque también puedes seleccionar el gris y el marrón, que es una de las mezclas más favorecedoras.
Cuando lo hayas decidido, aplica la sombra clara en el párpado móvil y deja la más oscura para el párpado fijo. Pero recuerda lo siguiente: la zona del lagrimal hasta la parte media del párpado, irá con una tonalidad clara. Esta se intensificará en la otra parte del ojo, es decir, desde la mitad del mismo hacia la sien, con el color más oscuro.
Puedes aplicar las sombras con un pincel y usar otro para difuminarlas. Recuerda tener a mano siempre los pinceles principales para disfrutar de los mejores resultados. Pero si no consigues el efecto deseado, hay un truco infalible: puedes pintar con un lápiz oscuro, la zona de unión entre ambos párpados. Luego la tendrás que difuminar para que se vea más natural. ¿Por qué hacer la forma del ahumado con lápiz? Porque será más precisa y luego tan solo tienes que rellenar los espacios con la sombra y un pincel.
Dale más brillo a tu mirada aplicando sombra dorada o plateada
Ya tenemos clara la combinación de las dos tonalidades en los párpados. Pues bien, ahora necesitas una buena dosis de brillo. Porque el brillo siempre completa el maquillaje de fiesta, el más elegante y también el más sensual como es el caso. ¿Dónde aplicamos dicho brillo? Pues lo harás en el lagrimal eligiendo un poco de sombra dorada o plateada, según tu gusto.
Puedes extenderla un poco más hacia el centro del párpado y como no, también aplicar sobre el párpado móvil, es decir, sobre la zona de las pestañas. En esta parte, a veces vemos cómo un poco de purpurina es una idea de lo más especial para completar el maquillaje. Tampoco nos vamos a olvidar del arco de la ceja, que también necesita llevar esa dosis de brillo. Aunque en este caso se lo podemos dar con un iluminador.
Traza el delineado en color negro
Ahora ya tenemos casi el smokey eye hecho y completo. Pero nos falta otro de los pasos vitales para poder decir que hemos terminado: el delineado. Si las sombras hacen que el ojo tenga más profundidad, los delineado no se quedan atrás. Tambien en este terreno tienes varias opciones. Porque puedes optar por el delineador líquido o bien trazar la línea con un lápiz y difuminarla.
Son dos alternativas que van en función de gustos o de práctica, ya que con ambos el resultado será muy completo. Te aconsejamos que hagas el delineado superior pero también el inferior, en las pestañas de abajo. Ya que de este modo conseguirás enmarcar más el ojo. Si tienes los ojos caídos, entonces opta por trazar la línea de agua pero intenta no aplicar sombras o delineados inferiores.
Dale más grosor a las pestañas
Tampoco nos íbamos a olvidar de las pestañas. Porque ellas consiguen que nos veamos mucho más favorecidas en todo momento. En este caso, no iba a ser menos y por ello debes aplicar el rímel que más te guste. Aunque siempre aconsejamos uno que aporte volumen extra y que sea Waterproof. Haz una primera pasada desde las raíces hacia la zona de las puntas desde arriba hacia abajo. Para luego dar una nueva pasada de máscara de pestañas desde la parte interna hacia el exterior.
Llegados a este punto son muchas las personas que optan por las pestañas postizas. Es otro de los complementos idóneos ante un maquillaje pronunciado como este. Pero eso ya va en función de gustos.
Labiales claros para terminar el smokey eye
La intensidad está en los ojos, como hemos mencionado. El maquillaje ahumado lleva tonalidades intensas, delineados en color negro así como pinceladas de brillo o glitter, si así lo deseas. Por eso que la atención se centra en la mitad superior del rostro. La mitad inferior, o los labios quedan en un segundo plano.
Lo mejor es que en este caso optemos por labiales claros, nude o rosados pero con un toque de brillo. Queremos cuidarlos pero que los ojos sigan siendo los protagonistas.