Las mejores 41 frases de Mafalda para reflexionar sobre la vida

Mafalda es un personaje amado por todos, y durante años nos hizo reflexionar con sus frases que nos hacían replantearnos el sentido de las cosas.

Las mejores 41 frases de Mafalda para reflexionar sobre la vida
Una tierna niña que tenía mucho que decir...

Mafalda es un personaje ficticio que fue creado por el humorista argentino Joaquín Salvador Lavado Tejón, más conocido por su seudónimo, Quino. Hace ya un par de años que el humorista y dibujante abandonó la vida terrenal, pero su personaje se convirtió en un ícono mundial de inteligencia e ingenio.

Esta niña formaba parte de una tira cómica que pretendía reflejar el idealismo de la clase media y progresista, con preocupación y rebeldía ante los problemas de la sociedad actual, todo ello mediante sabias reflexiones sobre la felicidad y el sentido de la vida, y en ocasiones, con algo de ironía e irreverencia.

Y para seguir recordando a este personaje, hemos recopilado algunas de las mejores frases de Mafalda, algunas de ellas cargadas de mucha verdad y profundidad, las cuales siguen resonando a día de hoy.

Frases y reflexiones de Mafalda

A continuación podremos ver unas 41 frases con las que el personaje de Quino, Mafalda, con solo un par de palabras nos hará reflexionar sobre la vida, con frases contundentes, pero ciertas y algunas de ellas con mucha intención de crítica.

«¿Qué importan los años? Lo que realmente importa es comprobar que al fin de cuentas la mejor edad de la vida es estar vivo».

Que importan los años, frase de Mafalda (2)

Irónicamente, mientras más pasan los años, más nos olvidamos de ello

La edad es solo un número, la mejor etapa para vivir la vida es el día de hoy, ya que como Mafalda nos ha dejado claro en más de una ocasión, la vida hay que vivirla con una plenitud absoluta.

«Hoy he aprendido que hay que dejar que la vida te despeine, por eso he decidido disfrutar la vida con mayor intensidad».

En ocasiones tenemos demasiadas preocupaciones superficiales y estamos tan sumergidos en detalles que dejamos de disfrutar la vida con la intensidad que se merece, es por ello que deberíamos apreciar el presente y vivir con plenitud justo aquí y ahora.

«En este mundo cada quien tiene su pequeña o gran preocupación».

Todas las personas tienen sus propios problemas y la magnitud de los mismos dependerá exclusivamente de cómo ellos lo conciban.

«No es que no haya bondad, lo que pasa es que está de incógnito».

Muchos actos de bondad a veces pasan desapercibidos en un el impetuoso día a día, por lo que debemos reconocer que la bondad está presente, aunque en la mayoría de los casos no la veamos de manera evidente.

«Sería lindo despertar un día y encontrarse con que la vida de uno, depende de uno».

Es momento de asumir la responsabilidad de nuestra propia vida, pues, así, podremos disfrutar de un sentimiento empoderador y liberador.

«La vida es linda, lo malo es que muchos confunden lindo con fácil».

Una reflexión muy bonita sobre la vida, donde nos recuerda que a pesar de las dificultades que se pueden presentar en el camino, estos obstáculos también forman parte del viaje que estamos recorriendo.

«Hoy no es un día cualquiera, es un día de mi vida».

Mafalda nos deja una frase de la filosofía de esta pequeña niña, quien nos invita a vivir de manera consciente y apreciar cada día como si se tratase de una oportunidad única, pues, cada día es especial y deberíamos disfrutarlo plenamente.

«¿Y si en vez de planear tanto voláramos un poco más alto?».

Con esta frase, nos sugiere que es momento de empezar a cuestionar la rutina y la conformidad con la que vivimos, haciéndonos entender que en ocasiones puede resultar más beneficioso tener un espíritu aventurero e ir más allá de las limitaciones y convencionalidades habituales, quizá, asumiendo algunos riesgos.

«¡Sonríe! Es gratis y alivia el dolor de cabeza».

Abordar con una actitud positiva cualquier situación tiene un impacto significativo y positivo en la vida cotidiana.

«¿No será acaso que esta vida moderna está teniendo más de moderna que de vida?».

En ocasiones, la tecnología y su impacto, junto a las preocupaciones cotidianas y la congestión del día a día, nos está alejando de lo que realmente significa vivir.

«Ahí está esa palomita…, no sabe lo que es el dinero y, sin embargo, es feliz».

Ahi esta, esa palomita no sabe lo que es el dinero y sin embargo es feliz - Mafalda

No hace falta ostentación para ser feliz

La felicidad la podemos encontrar en cualquier cosa, sin importar que tan simple sea. Podemos disfrutar de la vida sin ningún tipo de obsesión por la acumulación de riquezas.

«Comienza el día con una sonrisa, verás lo divertido que es ir por ahí desentonando con todo el mundo».

Una sonrisa puede ser suficiente para destacar en un mundo que cada vez está más lleno de problemas y preocupaciones. Además, este pequeño gesto puede contribuir a una interacción más agradable con los demás.

«No es cierto que todo tiempo pasado fue mejor. Lo que pasaba era que los que estaban peor todavía no se habían dado cuenta».

Ya es hora de dejar de mitificar el pasado. Está bien recordarlo con nostalgia, sin embargo, debemos de tener en cuenta que en ese momento se tenían dificultades diferentes.

«¿Pensaron alguna vez que si no fuera por todos nadie sería nada?».

Todos tenemos un lugar y un valor en el mundo, y aunque creamos que no es así, la sociedad y nosotros mismos nos formamos gracias a la colaboración y el aporte de todos los que nos rodean.

«La vida no debiera echarlo a uno de la niñez sin antes conseguirle un buen puesto en la juventud».

Aunque esta reflexión no es de Mafalda, merece la pena aparecer en este recopilatorio. Miguelito nos hace ver la importancia que tiene el garantizar que los niños y jóvenes tengan aspectos básicos para que puedan desarrollarse de forma adecuada hacia su adultez.

«¿No sería más progresista preguntar dónde vamos a seguir, en vez de dónde vamos a parar?».

Sin duda, la filosofía de Mafalda en muchos casos es dejar que las cosas fluyan y continúen, en lugar de centrarse de forma activa en darles un fin.

«Es curioso, uno cierra los ojos y el mundo desaparece».

A menudo estamos demasiado centrados en lo que nos rodea, en la exigencia del trabajo y la sociedad, en problemas, que al final nos olvidamos de vivir la vida a nuestro ritmo. Por lo que en ocasiones deberíamos desconectarnos y relajarnos, tomándonos un momento de calma y reflexión para calmar la agitación de la vida cotidiana.

«Cuando no sepas qué ponerte, ponte feliz. La felicidad combina con todo».

Una actitud optimista es la mejor forma de hacer frente a los desafíos, todo es mucho más fácil cuando tenemos un pensamiento adecuado y tan valioso como la felicidad.

«Yo diría que nos pusiéramos todos contentos sin preguntar por qué».

No deberíamos tener una razón o un motivo concreto para estar llenos de felicidad y alegría. Si pudiésemos expresar y experimentar la felicidad de manera espontánea y sin complicaciones, sin duda seríamos mucho más capaces de disfrutar del presente.

«Como siempre: lo urgente no deja tiempo para lo importante».

Como siempre la gente no deja tiempo para lo importante

A veces nos olvidamos de las cosas que realmente deberíamos valorar

Actualmente, tenemos un ritmo de vida muy acelerado, siempre intentando hacer multitareas y con una intensa preocupación que al menos parecen ser más urgentes de lo que son y nos terminan por distraer de aspectos que de verdad son significativos, como las relaciones, los valores personales, los sueños y las metas.

«En esta familia no hay jefes, somos una cooperativa».

Una frase que critica los diferentes estilos de crianza, donde en algunas familias se educa con liderazgo y autoridad, mientras que en otras se educa desde la responsabilidad compartida y donde la toma de decisiones se realiza en conjunto.

«¿Y no será que en este mundo hay cada vez más gente y menos personas?».

Nuevamente, Mafalda hace una crítica a la sociedad cada vez más deshumanizada, donde ahora se mueve por el poder económico y por una competencia absurda, en lugar de preocuparnos por nuestros semejantes.

«El problema es que hay más gente interesada que gente interesante».

La naturaleza humana actual se está centrando más en las preocupaciones personales y en el beneficio propio, que en ser personas con un aporte valioso para la sociedad.

«¡Resulta que si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno!».

Ser proactivos y tratar de influir en el mundo es el primer paso para evitar que el entorno tan tergiversado nos afecte de manera negativa mientras esperamos que las cosas sucedan por arte de magia.

«De vez en cuando conviene sacar a pasear un poco el instinto».

En ocasiones, nos olvidamos de nuestro instinto humano, ese sexto sentido que muchas veces nos lleva por el camino correcto.

«Lo ideal sería tener el corazón en la cabeza y el cerebro en el pecho. Así pensaríamos con amor y amaríamos con sabiduría».

Un mundo donde las personas pudiesen combinar la sabiduría y la lógica, con la empatía, el amor y la comprensión. Esto para Mafalda sería una auténtica maravilla.

«Como siempre, apenas uno pone los pies en la tierra y se acaba la diversión».

La vida, la sociedad y la transición a la adultez en una sola frase. Esta cita nos refleja, desde su perspectiva, cómo a medida que crecemos y nos enfrentamos a las demandas del mundo adulto, toda la diversión, la creatividad y la libertad a la que estábamos acostumbrados desaparece inmediatamente.

«De tanto ahorrar en educación, nos hemos hecho millonarios en ignorancia».

Esta frase deja en evidencia la crítica social y preocupación de Mafalda por la poca importancia que se le presta a la educación, y cómo esta acción tiene un impacto tan negativo en la sociedad en la que vivimos.

«Los cheques de tus burlas no tienen fondos en banco de mi ánimo».

Una frase muy sarcástica donde nos recuerda que las burlas y los intentos de los demás por hacernos daño no tienen por qué ser importantes.

«¡¡Paren el mundo, que me quiero bajar!!».

Paren el mundo que me quiero bajar

Una frase que pasaría a la historia

Esta frase, aunque se ha convertido en un símbolo de la crítica social y la sensación de desencanto donde deja en evidencia las preocupaciones, la complejidad y el ajetreo de la vida moderna, realmente no es de Mafalda. Su verdadero autor es Groucho Marx.

«¡Que levanten la mano los que estén hartos de ver el mundo manejado con los pies!».

Una crítica muy dura donde Mafalda expresa su descontento con la forma en la que, muy a menudo, se administra de forma incoherente e ineficiente todo lo que nos rodea.

«¿No sería hermoso el mundo si las bibliotecas fuesen más importantes que los bancos?».

Nuevamente, otra frase que si bien no pertenece a Mafalda, sí a uno de los personajes de la misma tira cómica. En esta ocasión se trata de una pregunta retórica de Felipe, quien aborda lo positivo que sería que la sociedad priorizara la educación, la cultura y los valores intelectuales sobre las cosas banales y materiales.

«¿No es increíble todo lo que puede tener adentro un lápiz?».

Felipe es conocido por ser un pensador ingenioso y filosófico, en esta oportunidad nos deja una frase que tiene un toque reflexivo de cómo la simplicidad de las cosas cotidianas esconde un mundo maravilloso si lo vemos desde la perspectiva adecuada.

«Sí, ya sé, hay más problemólogos que solucionólogos, pero ¿qué vamos a hacerle?».

La mayoría de las personas tiende solo a sentarse y quejarse de la realidad, a señalar lo que está mal. Muy pocas personas son las que realmente se toman el tiempo de buscar soluciones.

«Lo malo de los medios masivos de comunicación es que no nos dejan tiempo para comunicarnos con nosotros».

En muchas ocasiones el exceso de información al que estamos expuestos hace que nos olvidemos de la importancia de comunicarnos con los demás, o incluso, con nosotros mismos.

«Si no haces cosas estúpidas cuando eres joven, no tienes nada de que sonreír cuando estás viejo».

Una frase que incita a disfrutar de la juventud, a no tomarse las cosas con demasiada seriedad en esta etapa. Es un momento para experimentar y vivir nuevas experiencias, que nos hagan tener buenas anécdotas en un par de años.

«Hoy quiero vivir sin darme cuenta».

Nuevamente, Mafalda nos invita a vivir la vida al máximo, sin detenernos por las preocupaciones y los pensamientos diarios.

«No envejeces cuando se arruga la piel, sino cuando se arrugan los sueños y esperanzas».

Mafalda era una fiel creyente de que la edad no representa un verdadero valor en la vida. Por lo que no importa que tanto tiempo pase, siempre que tu actitud y optimismo estén intactos, aún no es tarde para hacer grandes cosas.

«Un libro es un buen amigo».

Mafalda, en una conversación con su amigo Miguelito, le recomienda los libros como una forma de entretenimiento, dando a entender que ante el aburrimiento y la poca creatividad, una lectura puede ser una buena solución.

«Lo bueno de la geografía es que nos regala un paseo maravilloso sin salir del libro».

Un libro de geografía o mediante el estudio, podemos explorar todo el globo terráqueo sin siquiera haber salido físicamente de nuestra casa. Increíble, ¿no?

«Debiera haber un día en la semana en el que los periódicos nos engañaran un poco dando buenas noticias».

Una crítica de Mafalda de cara a la sociedad y cómo se han convertido en una máquina productora de desapego, maldad y poca humanidad.

Sin duda, Mafalda es un personaje que con sus ocurrencias, carisma, sarcasmo y con su visión tan profunda se ganó el corazón de muchos. Sus frases, en ocasiones, pueden ser tan reales que se sienten filosas, algo completamente diferente a las frases para felicitar en el día de las madres, las cuales están repletas de amor y comprensión. Pero en cualquier caso, las frases de Mafalda tienen algo en común: verdad...

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