El pillbox hat vuelve en versión lana y pelo (y se ha colado en el street style de otoño)
El sombrero más icónico de los 60 ya se dejó ver en verano y esta temporada promete quedarse

Reconozcámoslo: los sombreros imponen. No se compran sin pensarlo ni se llevan por costumbre. Exigen actitud, y por eso muchos acaban guardados antes de estrenarse. Pero este otoño hay un modelo que está logrando reconciliarnos con ellos: el pillbox hat, ese pequeño sombrero sin ala que parecía cosa del pasado y que, tras verse en verano en versión paja, vuelve esta temporada a abrirse hueco en el street style.
La textura es la clave, ahora llega en lana o efecto pelo, materiales cálidos que cambian su carácter y lo adaptan al invierno.
Así llega esta temporada

Sombrero tipo pillbox en tonos burdeos y negro, con diseño estructurado y acabado de inspiración sesentera | Parfois
En las tiendas, el regreso del pillbox también se nota. Parfois lo recupera en versión clásica, con una silueta pulida y colores sobrios —negro y burdeos— que encajan con su estética vintage.
Es el tipo de diseño que podría llevarse con americana y falda lápiz, y aunque nos lo imaginamos con looks más clásicos, también queda muy bien con vaqueros y abrigo largo si lo que buscas es un contraste más actual.

Versiones efecto pelo del sombrero pillbox en tonos lisos y estampado animal print | H&M
En H&M, la propuesta cambia por completo. La marca apuesta por una versión más llamativa con sus gorros efecto pelo, disponibles en marrón chocolate, beige, negro y estampado de leopardo.
Mantienen la forma del pillbox pero el acabado peluche recuerda a los gorros rusos clásicos, con más volumen y presencia. Aportan textura y se integran bien con chaquetas que tengan detalles de pelo o con abrigos de ante de aire boho, creando un contraste muy de temporada.
Así se lleva según el street style

Abrigos largos en tonos crema y burdeos con sombreros tipo pillbox a juego. Una combinación clásica con guiños retro en los accesorios | @valerie.kei y @madina_mariposa
El street style también se ha rendido a esta silueta. Los pillbox se cuelan en los looks más fotografiados del otoño, mezclando referencias retro con prendas actuales.
En la imagen de Valerie Kei y Madina Mariposa, se integran en conjuntos monocromáticos —uno en crema, otro en burdeos— que prueban que no hace falta arriesgar con el color para llevarlos bien. Los guiños clásicos llegan con los accesorios, desde los guantes de piel hasta el collar de perlas, y aportan ese toque clásico y elegante.

Abrigo con print de leopardo y complementos negros que equilibran el conjunto. El pillbox aporta el toque elegante al look más atrevido | @thepouf
En otra línea, el abrigo de leopardo con pillbox negro demuestra que este accesorio también puede equilibrar un look más atrevido. Todos los complementos son negros, lo que suaviza el estampado y mantiene el conjunto elegante. El resultado conserva el aire clásico del sombrero pero con una actitud mucho más actual, de esas que funcionan tanto en la ciudad como en un contexto más formal.
En la misma dirección, otros looks mantienen la base neutra y juegan con proporciones más marcadas. El blanco y negro sigue siendo la fórmula infalible: chaquetas estructuradas, pantalones sastre y pillbox negro que refuerza la geometría del conjunto. Es la versión más depurada de la tendencia, pensada para quienes prefieren un guiño clásico sin renunciar a la simplicidad.

Versiones más urbanas del pillbox: con vaqueros, chaquetas cortas o abrigos de cuadros. Diferentes formas de adaptarlo al día a día sin perder estilo. | @valerie.kei, @clairerose y @holacuore
Más relajados, los dos looks con vaqueros demuestran que el pillbox también puede integrarse en el día a día. En ambos casos, se combina con chaquetas cortas de inspiración tweed y accesorios sencillos, logrando ese equilibrio entre lo francés y lo casual que nunca falla. Una forma de restarle formalidad sin perder la referencia retro.
Por último, el look de Marta Escalante muestra una forma más cercana de interpretar la tendencia. Apuesta por un abrigo de cuadros marrones y bufanda a juego, una versión práctica y muy fácil de llevar en el día a día.
El pillbox hat no ha cambiado tanto de la versión veraniega a la de invierno. Su forma sigue igual de reconocible. Lo que antes era un accesorio para tapar del sol ahora lo es para abrigar; en ambos casos, cierra el conjunto con un toque distinto y lo redondea. Puede que no sea el sombrero más fácil pero esta vez tiene todas las papeletas para quedarse.