Medias que no se rompen: los consejos de Almu Carrión para encontrar las perfectas

Encontrar unas medias que aguanten más de dos usos parece misión imposible cada invierno. Se rompen, se bajan, hacen carreras en tiempo récord… y al final ninguna te soluciona el problema. Por eso el vídeo de Almu Carrión se ha hecho tan útil estos días, en menos de dos minutos desgrana qué detalles tienes que mirar para acertar sí o sí. Todo explicado con esa forma tan clara y directa que tiene de contar las cosas.

Aquí te dejamos su guía —muy práctica— con algunos matices que te ayudarán a elegir medias que realmente duren.

El den sí importa (y más de lo que parece)

Almu deja claro que el den es lo primero en lo que hay que fijarse. Las medias ultrafinas —entre 5 y 15 den— son ideales cuando buscas ese efecto segunda piel, pero también son las que más riesgo tienen: “vas a dar un paso y va a sonar crrjjj”, bromea imitando el clásico sonido de media rompiéndose.

@almucarrion

cómo saber si tus medias te van a defraudar o no

♬ Chopin Nocturne in Eflat major Op 9 No 2 - Abydos Music

Un poco más arriba, entre 20 y 30 den, encuentras un equilibrio bonito, aunque siguen siendo delicadas. Son mis preferidas, pero en mi experiencia suelen aguantar tres o cuatro puestas, no más.

Por eso ella apuesta siempre por el tramo medio: entre 40 y 60 den, lo que podríamos llamar el punto ganador. Mantienen estética, no son excesivamente transparentes ni completamente opacas y, sobre todo, sobreviven a más de una puesta.

Y si buscas un acabado realmente opaco, los modelos a partir de 100 den ya juegan prácticamente en la liga de los leggings. De hecho, cada vez más marcas tienen opciones con forro interior cálido y tupido que, aun así, imitan la apariencia de unas medias finas.

Panty térmico efecto velado 190 DEN (15,95€) | Ysabel Mora

Cómo evitar que se bajen a mitad del día

Otro drama clásico es que las medias empiezan perfectas pero, al rato, se van deslizando hacia abajo sin avisar. Para evitarlo, Almu aconseja fijarse en los modelos que traen esa zona tipo pantalón porque ofrece más sujeción. Y si no, tiene claro el plan B: “poner un calzoncillo encima o un tanga, y ahí no se baja ni Dios”.

Si prefieres diseños sin costuras, como muchos de Calzedonia, fíjate sobre todo en la cinturilla. Tiene que ser lo bastante firme como para no deformarse al estirarla con las manos. Si la estiras un poco y vuelve a su forma inicial sin quedarse dada de sí, es buena señal. En cambio, si la notas floja desde el principio o cede demasiado, lo más probable es que termine bajándose con las horas.

Pantis transparentes 40 DEN (7,95€) y pantis sin costuras 30 DEN (15,95€) | Calzedonia

La textura lo dice todo

Antes de lanzarte a comprar, Almu recomienda tener en cuenta cómo se comporta el tejido: “Mira si eso está tieso, ¿sabes lo que te quiero decir?”. Si notas el material rígido, con poca elasticidad o algo áspero, probablemente sea un modelo que termine rompiéndose al ponerlo.

Panty opaco Pure Matt 50 DEN en color rojo (25€) | Falke

Las medias de calidad suelen tener un punto de elasticidad y una textura suave y uniforme, algo que evita que hagan carrera al primer tirón.

Detalles invisibles que marcan la diferencia

Otro detalle que marca realmente la durabilidad de unas medias es la presencia de refuerzos. Los modelos con puntera reforzada, zona de culotte más compacta o cinturilla gruesa aguantan mejor los tirones y el roce del día a día.

No se ven cuando las llevas puestas, pero sí se notan cuando las usas: la puntera evita que se abra una carrera desde el zapato, el culotte suma resistencia en toda la parte superior y la cinturilla firme evita que cedan con las horas.

Pantis 40 DEN con estampado de corazones (6,99€), topos (5,99€), o estrellas (6,99€), | Tezenis

Son pequeños detalles que, sumados, hacen que unas medias dejen de ser para un día y se conviertan en un básico real.

La conclusión de Almu (y la que funciona)

Como dice ella al final del vídeo, “esa es la guía para encontrar tus medias definitivas este invierno”. Y tiene razón: acertar no es cuestión de suerte, sino de saber dónde mirar. Si quieres que duren, que no se rompan y que queden bien, la combinación ganadora pasa siempre por lo mismo: den medio, buena sujeción, elasticidad y refuerzos en los puntos clave. El resto es prueba (y error) del que ya no necesitas repetir.