Rocío Osorno da una lección de estilo y demuestra cómo cambian las tendencias de 2024 a 2025 con la misma falda como punto de partida
En su último vídeo, la andaluza repasa cómo una prenda puede transformarse por completo según las tendencias del momento

Cada temporada deja pistas sutiles de cómo cambia la moda. Rocío Osorno lo ha captado a la perfección con un vídeo que se ha convertido en toda una clase práctica de estilo. En él, la creadora andaluza compara cómo habría llevado una falda en 2024 y cómo la combina este año, en 2025. Dos looks opuestos que resumen mejor que cualquier pasarela hacia dónde se mueven las tendencias.
La protagonista del vídeo es una falda negra con un aire lencero, mezcla de satén y encaje, con un lazo lateral y un drapeado suave que marca la cintura. Una de esas prendas versátiles que pueden cambiar de registro según cómo se combinen. Y Rocío lo demuestra paso a paso, jugando con capas, texturas y accesorios.
El look 2024: el combo clásico que nunca falla

Rocío Osorno con falda lencera negra, medias, top ajustado de lycra con escote barco, botas de punta redonda y blazer satinada verde, un conjunto clásico con el aire más pulido de 2024 | @rocioosorno
Su propuesta “2024” es un homenaje a los básicos que dominaron el año pasado. Rocío la imagina con medias negras, botas altas de punta redonda y top ajustado de lycra con escote barco, una de esas piezas que definían el armario más minimalista de entonces. Encima, suma una blazer satinada verde, que muchas reconocerán porque fue una de sus prendas más repetidas por aquella época.
El conjunto tiene ese aire sofisticado y algo más pulido que marcó gran parte de los looks del pasado otoño. Todo está medido: los pendientes pequeños, el bolso negro básico, el juego de texturas suaves y el toque de brillo justo. Es el tipo de estilismo que funcionaba en 2024, cuando el acento estaba en la coherencia y el equilibrio más que en la mezcla.
El look 2025: capas y nueva silueta

Rocío Osorno actualiza la misma falda con pantalón tobillero, salones de punta afilada, top de cuello chimenea con hombreras y fular de gasa en la cintura, una propuesta fiel al layering de 2025 | @rocioosorno
Un año después, el planteamiento cambia por completo. En su versión “2025”, Rocío parte de la misma falda pero introduce el layering, una de las tendencias más marcadas de esta temporada. La combina con un pantalón tobillero que asoma por debajo, creando una superposición inesperada pero muy actual.
A los pies, cambia las botas por salones de punta afilada, un gesto que estiliza y aporta un aire más femenino. En la parte superior, opta por un top básico de cuello chimenea con hombreras y añade pendientes grandes, además de un fular de gasa en la cintura que aporta movimiento. El resultado es mucho más experimental, con siluetas que se cruzan, capas ligeras y contrastes de tejidos. Un look que encaja perfectamente con la estética 2025: más libre y con personalidad.
Una prenda, dos lecturas (y una idea en común)
Más allá del juego visual, su vídeo deja una idea interesante. Las tendencias cambian pero el estilo se mantiene. Rocío reinterpreta lo que ya tiene según lo que se lleva ahora. La falda sigue siendo la misma, pero la forma de combinarla refleja cómo evoluciona la moda sin perder identidad.
Su propuesta es una invitación a mirar el armario con otros ojos. No se trata de cambiarlo todo cada temporada, sino de saber leer el momento y adaptarlo al propio estilo. Y en eso, como demuestra, Rocío Osorno siempre va un paso por delante, fiel a una forma de vestir que evoluciona con ella.