Receta de tortas fritas: fáciles y sabrosas para el desayuno o la merienda

Las tortas fritas son un bocadillo típico de la gastronomía rioplatense. Estas son también conocidas como orejas, cachangas y buñuelos en diversas gastronomías del mundo y en cuanto a preparación es muy similar al picarón peruano y a la sopaipilla chilena.

Aunque es muy habitual tomarlas junto a un café o una infusión, dado su sabor sencillo pueden disfrutarse en cualquier ocasión. Se trata además de una receta ideal para preparar con niños, quienes disfrutarán especialmente de la fase del amasado. Esta última fase, por cierto, puede aligerarse bastante con la ayuda de una amasadora de brazo.

El truco para que las tortas queden bien esponjosas es poner atención en los pequeños detalles: es importante que tamices la harina, que las dejes reposar en nevera y que las frías con el aceite a buena temperatura.

Finalmente, si bien es cierto que la receta canónica opta por freír las tortas en aceite de girasol, también quedan bastante bien preparadas al horno. Quedan un pelín más secas pero se evita la grasa procedente de la fritura.

Cómo hacer tortas fritas paso a paso

1. Coloca los ingredientes en un bol

Coloca la harina en un recipiente en forma de corona para agregar en el centro la sal, la grasa o mantequilla y el agua templada.

2. Mezcla los ingredientes y forma una masa

Mezcla muy bien con una cuchara o con ayuda de tus manos hasta obtener una masa suave y homogénea.

3. Deja reposar la masa

Envuelve la masa en un paño y deja descansar aproximadamente 15-30 minutos fuera de la nevera.

4. Dale forma a las tortas

Divide la masa de las tortas fritas en bollos de igual tamaño y estira cada uno de ellos con un palote hasta que queden finos. Hazles un hueco en el centro para que entre el aceite cuando se frían y se cocinen mucho más rápido.

5. Reposo

Deja las tortas fritas sobre un paño mientras colocas abundante aceite en una sartén.

6. Fríe las tortas en abundante aceite

Cuando esté caliente, fríe las tortas de a una con cuidado de no quemarte hasta que se doren de ambos lados. Para ello, deberás darlas vuelta durante la cocción.

7. Retira el exceso de aceite

Retira con una pinza y deja escurrir en papel absorbente para quitar el exceso de aceite.

Sugerencias de presentación

Si lo deseas puedes espolvorear las tortas fritas con azúcar, doblarlas y consumirlas calentitas. Para saber si el aceite está caliente, lo que puedes hacer es echar un poquito de masa antes de colocar las tortitas, y si empieza a burbujear (no humear) es porque ya está a punto para freír.

Si optas por espolvorearlas con azúcar glas es importante que esperes a que las tortas estén del todo escurridas ya que de lo contrario el azúcar se empapará de aceite y la presentación perderá parte de su magia.

Como ya hemos comentado al principio, dado que se trata de una receta muy típica en países como Argentina o Uruguay, lo más habitual es comer estas tortas fritas junto a un mate, como si de unas "pastitas" de té se trataran. También, como se trata de una masa salada, pueden consumirse de acompañamiento a ciertos platos, como por ejemplo unos huevos fritos o una tabla de embutidos y quesos.

Lo mejor de la receta es que con medio kilo de harina tendremos una masa más que suficiente para entre una docena y una veintena de tortas, siempre en función del tamaño que le demos a cada bola. Nuestro consejo es que las hagas del tamaño de un puño, es decir, de lo que te quepa en la mano.