5 consejos para exfoliar tu piel este verano
Exfoliar la piel ayuda a eliminar las células muertas y a dejarla suave y sedosa
El verano es una de las épocas del año en las que más sufre la piel. Por este motivo, darle los cuidados que necesita es algo aún más necesario que en el resto de temporadas. Una de las cosas que nunca podemos olvidar es la exfoliación. De este modo, eliminamos las células muertas y la dejamos suave y radiante. Saber qué pasos dar es vital para tener éxito.
Estos son los 5 pasos a seguir para una exfoliación correcta
Limpiar e hidratar la piel, sobre todo en verano, son dos pasos imprescindibles. Sin embargo, tampoco hay que dejar de lado la exfoliación. Aunque no hay que hacerla a diario, sí es necesaria para que tu piel esté siempre perfecta. Estos cinco consejos te ayudarán a conseguirlo.
Elige el exfoliante adecuado
Si tu piel es normal podrás usar cualquier exfoliante. No obstante, si tu piel es seca, lo mejor es elegir un exfoliante con poder hidratante. Por el contrario, si es grasa, elige uno que elimine el exceso de sebo.
En el caso de que tu piel sea mixta puedes usar también un cepillo según la zona. Por último, si tienes la piel sensible, opta por un exfoliante que no la irrite.
Haz la exfoliación por la noche
Cuando exfolias tu piel expones una nueva capa. Esto hace que sea más sensible. Por este motivo, los expertos recomiendan hacerlo por la noche para evitar los rayos del sol. Además, así la proteges también de los radicales libres, haciendo que se recupere durante las horas de sueño. Si lo haces una o dos veces a la semana notarás los resultados.
Protección solar
Aunque exfolies tu piel durante la noche nunca puedes olvidar la protección solar. Los expertos inciden en que la piel es mucho más sensible a la radiación solar cuando la exfolias. Por ello, debes aplicar una buena protección de un SPF mínimo de 30, pero mejor si es de 50 o 50+.
Una zona, un método
También debes adaptar el método de exfoliación según la zona. En brazos y piernas puedes usar guantes, cepillos o esponjas. Frota tu cuerpo en la ducha unos 30 segundos. Si hablamos de las manos puedes hacer un peeling adecuado. Para los pies nada mejor que usar la clásica piedra pómez. Por último, en la ingle o en la axila, opta por un exfoliante suave o un cepillo corporal que no irrite.
Hidratación
El último paso siempre debe ser la hidratación. Cuando termines de exfoliarte aplica una crema hidratante según tu tipo de piel. Así conseguirás que no haya irritaciones y que quede suave y radiante durante mucho más tiempo.