Los errores que estás cometiendo al aplicar tu sérum facial

Seguir el orden correcto en nuestra rutina de belleza es esencial para conseguir una piel perfecta. El sérum facial, en este caso, se ha convertido en un imprescindible dentro de nuestro neceser gracias a sus múltiples beneficios. Sin embargo, a pesar de que su popularidad ha ido creciendo en estos últimos años, aún son varios los errores que se cometen durante su aplicación. Conocerlos es vital para obtener buenos resultados.

Estos son los errores más comunes al aplicar el sérum facial

Saber aplicar el sérum de la forma correcta es primordial. Si ya lo usas, es necesario que conozcas los errores que más se repiten para que maximices sus resultados. De este modo, te asegurarás de que tu rutina sea siempre efectiva.

No limpiar bien la piel

Uno de los primeros errores que se cometen a la hora de usar el sérum es no limpiar la piel con anterioridad de la manera correcta. Para conseguir el máximo beneficio, nada mejor que apostar por el proceso de la doble limpieza. En primer lugar, retira los restos de suciedad, grasa o maquillaje con agua micelar. Después, repite con tu limpiador facial favorito.

Recuerda aplicar el sérum sobre la piel limpia para conseguir un buen resultado

Fallar en la cantidad

El segundo error es el de no aplicar la cantidad correcta. Lo más recomendable es usar muy poco, tan solo unas gotas, y distribuirlas por toda la zona. Si te pasas con la dosis, el sérum te durará menos y no por ello obtendrás más resultados, ya que la piel no lo absorberá bien.

Sustituir con él la crema hidratante

Por otro lado, otro de los errores que muchas cometen es utilizarlo como sustituto de la crema hidratante. Debes saber que este producto tiene una fórmula distinta y sirve como apoyo a la crema, pero no la sustituye. Es decir, son complementarios y lo ideal es usar ambos para maximizar los resultados. Cuando los combinas bien, tu piel luce mucho más cuidada, luminosa y libre de imperfecciones.

Olvidar el cuello

Por último, otro de los erroes que más se repiten es el de no aplicar el sérum en el cuello. Esta es una zona sensible y en la que el paso de los años se nota mucho más. Por ello, además de en el rostro, siempre debes aplicar el producto sobre el cuello para aprovecharlo al máximo.