Los mejores trucos para sanear tu pelo tras el verano en minutos
Agentes externos como la radiación solar, la sal o el cloro causan estragos en tu melena
El verano es una de las épocas del año en las que más sufre nuestra melena. Al estar expuesto a factores externos como la radiación solar, la sal o el cloro de las piscinas, es normal terminar la temporada con el cabello estropeado. Sin embargo, siempre existen algunos trucos que puedes aplicar desde ya para cuidar tu pelo y resolver este problema de forma sencilla.
Estos son los mejores trucos para recuperar tu cabello tras el verano
Los factores externos de los que hablamos pueden dejar el cabello seco, dañado y con puntas abiertas. Por ello, conocer estos tres trucos sencillos y efectivos será vital para sanear tu cabello y devolverle su vitalidad.
Hidrata en profundidad
Uno de los principales problemas del cabello tras el verano es la deshidratación. Para combatirla, es crucial nutrir el cabello con mascarillas hidratantes. Puedes optar por mascarillas caseras a base de ingredientes naturales como el aguacate, el aceite de coco o el yogur. Estos ingredientes son ricos en vitaminas y ácidos grasos esenciales que ayudan a reparar y fortalecer el cabello desde la raíz hasta las puntas. Aplica la mascarilla una vez por semana y déjala actuar durante al menos 20 minutos antes de enjuagar con agua tibia. Esto ayudará a restaurar la suavidad y el brillo natural de tu cabello.
Sanea las puntas
Las puntas abiertas son un signo común de daño capilar después del verano. Una de las mejores maneras de sanear el cabello es recortar las puntas dañadas. No es necesario un corte drástico, basta con un pequeño recorte cada seis u ocho semanas para mantener el cabello sano y evitar que las puntas abiertas se extiendan hacia arriba. Este sencillo truco no solo mejora el aspecto del cabello, sino que también promueve un crecimiento más saludable.
Evita el exceso de calor
Tras el verano, el cabello ya ha estado expuesto a mucho estrés, por lo que es recomendable minimizar el uso de herramientas de calor como planchas, secadores y rizadores. Si necesitas usarlos, asegúrate de aplicar un protector térmico para reducir el daño. Alternativamente, puedes optar por métodos de peinado sin calor, como trenzas o moños, que también pueden ayudarte a mantener un estilo bonito mientras tu cabello se recupera.