5 trucos para hacer que tus sábanas y toallas huelan siempre a limpio

Las toallas y las sábanas son las protagonistas de los textiles de nuestro hogar. Esto hace que siempre deseemos que huelan bien, algo que es fácil de cumplir si llevamos a cabo ciertos consejos. Uno de los detalles más importantes a tener en cuenta, y que solemos pasar por alto, es el aclarado. Además, existen otras formas de incrementar el buen olor de estos textiles de forma sencilla y, sobre todo, sin tener que gastar grandes cantidades de dinero.

Vinagre, bicarbonato y jabón de Marsella

Productos como el vinagre de limpieza o el bicarbonato de sodio se convierten en buenos sustitutos del suavizante. Sin embargo, aunque aportan suavidad a los tejidos, no dejan olor. Para solucionarlo, nada mejor que añadir a la mezcla un poco de jabón de Marsella. Después, agrégala en el cajón de enjuegue de la lavadora y obtén un aroma increíble.

Secar al aire libre

El buen olor de la ropa depende bastante de cómo se seque. Lo mejor es secar las toallas y las sábanas al aire libre. Sin embargo, si debes secarlas en el interior, hazlo en una habitación sin humedad y recógelas en cuanto estén secas.

Productos como el aceite esencial de lavanda añaden un extra de olor en tus textiles

Aceite esencial de lavanda

Este aceite destaca por sus propiedades relajantes, convirtiéndose en la mejor alternativa para añadir buen olor a los textiles de tu hogar. Para maximizar el resultado, pulveriza agua con unas gotas de aceite esencial de lavanda antes de planchar las sábanas o toallas.

Aromatizar el armario

Agrega unas pastillas de jabón como su fueran un ambientador dentro del armario donde guardes tus sábanas y toallas. También puedes colocar aceites esenciales o flores secas para dar un aroma más intenso.

Un poco de perfume

Por otro lado, otro de los trucos que mejor funcionan es guardar el perfume que más te guste dentro del armario donde tengas la ropa de cama o las toallas. De este modo, estas se impregnarán de su aroma, pero de forma muy sutil. También puedes pulverizar un poco sobre los textiles, a una distancia de unos 20 cm, para que el resultado sea más potente.