Pechugas de pollo rebozadas: receta clásica de las abuelas

Hay sabores, olores, colores… que nos trasladan a otra época o que nos evocan a una persona muy especial. Y en este caso, muchas personas seguramente coincidirán en que esta receta les recuerda el sabor inigualable de la comida de las abuelas. Es una receta de esas que hacen ellas, por ejemplo un delicioso y esponjoso bizcocho, que por mucho que intentes igualar, no hay manera, ya que la suya siempre tiene un sabor muy especial y un extra de esponjosidad.

Ellas hacen de recetas como estas, pequeños tesoros repletos de sabor. Es por esto que, si quiere preparar un platillo lo más similar al de tu abuela, debes seguir al pie de la letra, esta que hoy te compartimos: la clásica receta de las abuelas para preparar las mejores pechugas de pollo rebozadas. Esperamos que les guste y la disfruten con toda su familia.

Cómo hacer las pechugas de pollo rebozadas de la abuela paso a paso

1. Marinar las pechugas

Antes de comenzar a cocinar las pechugas de pollo hay que dejarlas marinar en la nevera con el ajo y perejil al menos dos horas.

2. Prepara el rebozado

Comenzamos preparando dos platos para el rebozado: uno plano con harina y otro un poquito más hondo con los 3 huevos, previamente batidos.

3. Retirar del marinado y preparar la sartén

Cogeremos las pechugas fileteadas y les retiraremos el exceso de especias, luego, ponemos en el fuego una sartén con media taza de aceite de oliva.

4. Ahora a empanar

A continuación empanaremos los filetes de pollo, primero en harina y a continuación en huevo.

5. Es momento de freír

Comenzamos a freír en la sartén cuando el aceite esté muy caliente.

6. Retirar y dejar enfriar

Al tener un color dorado por ambos lados los retiraremos de la sartén y los pondremos en una fuente. Dejar enfriar y estarán listos para servir.

Sugerencias de presentación y consumo

Primero, para que la presentación sea más elegante sin exceso de aceite y también un poco más sana, en la fuente en la que las colocas al sacar de la sartén, sería conveniente poner papel de cocina por debajo, dado que este absorberá el aceite que puedan soltar los filetes. Y si pones otro poco entre cada una, el resultado será aún mejor. Sírvelas en la fuente al centro de la mesa o en platos individuales con sus respectivos acompañamientos.

Los acompañamientos para las pechugas pueden ser muchos y muy variados, pero desde luego, hay algo imprescindible bajo nuestro punto de vista: poner unas gotas de zumo de limón por encima o un poco de chimichurri argentino, le quedará de maravilla. Además de ese detalle, podríamos servirlos con patatas fritas, con algo de verdura, o incluso con un poco de arroz en blanco. Sea lo que sea, seguro que acertarás, dado que es casi imposible no acertar con el acompañamiento. ¡Qué aproveche!