Por qué se pelan los labios y cómo puedes solucionarlo
Si sueles sufrir mucho con los labios resecos y descamados, aplciar estos consejos debería ser suficiente.
Sabemos lo molesto que es tener que lidiar con los pedacitos de piel hasta el dolor en los labios al comer algo. Los labios secos y agrietados no solo son un problema estético, pueden ser un verdadero dolor de cabeza, y en muchos casos, no importa si conocemos los secretos para pintarse los labios, pueden arruinar por completo el maquillaje, especialmente cuando empiezan a pelarse.
Lo peor de todo es que en ocasiones ni siquiera es tu culpa, ya que los cambios de estaciones o incluso pasar mucho tiempo al sol puede ser el responsable de este problema. Es por ello que una buena solución es tener siempre debes de tener a la mano un bálsamo labial y así hacer frente al problema.
Sin embargo, hay muchas formas y productos que pueden ayudarte con la sequedad labial, de esta forma la descamación, grietas y la resequedad serán problemas del pasado.
¿Por qué se secan y pelan los labios?
Antes de siquiera pensar en las soluciones para los labios secos, es necesario conocer por qué se produce este problema.
Debemos empezar señalando que, a diferencia de la piel, los labios no cuentan con glándulas sebáceas. Esta incapacidad para remover las células viejas y lubricarse, es precisamente la razón por la que tienen una mayor tendencia a secarse y pelarse en comparación a otras partes del cuerpo.
Por si fuese poco, entre las capas de la piel existe una pequeña parte llamada “estrato córneo”, la cual también se encuentra ausente en los labios, por lo que la susceptibilidad a la sequedad es mayor, pues, es incapaz de contener la hidratación como el resto de la piel.
Sin embargo, la mayoría de las personas experimenta labios agrietados a diario, así que probablemente no sea ningún problema real de base, simplemente puede que se deba a que no estás cuidándolos como se debe. Por lo general, una vez apliques ciertos productos y hagas cambios mínimos en tus hábitos, el problema se esfumará en un abrir y cerrar de ojos.
Aunque, a pesar de esto, existen muchas cosas que pueden estar influyendo en la sequedad de tus labios, y a continuación te contaremos algunas de las más frecuentes.
Deshidratación corporal
Debido a que los labios no tienen glándulas sebáceas, pierden la humedad con una facilidad increíble, lo que por supuesto lo hace mucho más susceptible a la resequedad.
Por suerte, la solución ante este problema es sumamente fácil: beber más agua. Uno de los problemas más frecuentes es esperar a sentir sed para beber agua, pero en realidad es un error.
La sensación de sed es un tanto compleja, pero esta necesidad se activa habitualmente justo después de la deshidratación, y no antes. Esto quiere decir que si hemos sentido sed, ya es muy tarde.
Por otro lado, no existe una cantidad promedio de agua que debemos consumir, a pesar de que esté tan extendido que se necesitan de 2 litros de agua u 8 vasos. Lo cierto es que esto varía dependiendo de la persona, la actividad física, el clima, su alimentación, etc. El truco es simplemente beber agua antes de tener sed.
El tiempo y el clima
El tiempo caluroso aumenta notablemente las probabilidades de deshidratación, así como la exposición solar durante tiempo prolongados, lo que hará sufrir un poco –mucho– a tus labios.
Además, recuerda que tus labios no tienen la capa más externa que se encuentra presente en el resto de la piel, lo que los hará especialmente más vulnerables. El sol también puede causar quemaduras solares en tus labios.
En caso de que debas pasar obligatoriamente mucho tiempo al aire libre, lo mejor va a ser proteger tus labios con un bálsamo con FPS. Esto, además, te ayudará a mantenerlos hidratados y evitar los labios agrietados y despellejamientos.
Por otro lado, el tiempo frío también será uno de tus peores enemigos, pues, el aire seco se encargará de llevarse toda la humedad de tus labios, lo cual hará que sea más probable que se sequen.
Y si bien no puedes controlar el ambiente, en tu hogar sí puedes usar un humidificador y encenderlo en las habitaciones donde pasas más tiempo. Tus labios, tu piel y tu pelo te lo agradecerán, especialmente durante el invierno, cuando el aire es bastante seco.
Lamerse los labios
Instintivamente caemos en la necesidad de pasar la lengua por los labios para hidratarlos un poco, después de todo, produce una sensación de satisfacción y un alivio momentáneo a los labios secos, por lo que debería ayudar… Un error bastante grave.
La saliva está hecha en casi su totalidad de agua, pero también cuenta con, entre tanto, moléculas que ayudan a comenzar el proceso de descomposición de macronutrientes, como proteínas, azúcares y grasas.
¿Esto que quiere decir? Pues, los labios también están hechos, en parte, de estos mismos compuestos, por lo que el contacto con la saliva solo hará que la irritación empeore y el daño aumente.
Respirar por la boca
La acción de respirar por la boca se traduce en una mayor interacción entre el aire caliente y tus labios, lo cual es la combinación perfecta para unos labios secos.
El inconveniente real viene cuando nos vemos obligados a respirar por la boca debido a una enfermedad o afección. En estos casos, la solución más adecuada será solucionar el problema de raíz, por lo que será necesario una visita al médico para que nos brinde las soluciones necesarias.
Pasta de dientes
Sí, la pasta de dientes también puede ser la responsable de que se pelen los labios. El lauril sulfato de sodio (SLS) es un ingrediente limpiador y tensioactivo usado en una cantidad incontable de pastas dentales.
Y aunque es muy bueno para los dientes, si la pasta de dientes que tienes en el baño tiene este ingrediente, es probable que sea la responsable de tus labios secos. Y es que el SLS es tan bueno haciendo su trabajo de detergente que puede llegar a “limpiar” los labios e irritarlos en el proceso, lo que puede causar esa molesta descamación.
Alergias
Las reacciones alérgicas pueden crear complicaciones desagradables en nuestros labios, algunos ingredientes como el níquel o el cobalto pueden hacer que tus labios se resequen más de lo habitual.
Por lo general, este tipo de reacciones de hipersensibilidad se deben, irónicamente, a productos para el cuidado de la piel, los labios o incluso por algunos alimentos.
De igual forma, el ácido cinámico y el cinamato, ambos ingredientes clave de muchos perfumes, pueden ser también responsables de este problema. Además, el ácido cinámico es usualmente un aromatizante en algunos dulces, por lo que debes tenerlo constantemente bien presente.
Esto quiere decir que si tienes la piel sensible o eres propenso a las alergias, debes prestar especial atención a la etiqueta de productos y a sus ingredientes.
Deficiencia de vitaminas
Las vitaminas juegan un papel importante en el organismo, incluyendo la salud de la piel, por lo que la deficiencia de algunos grupos puede causar sequedad labial.
Niveles bajos de vitamina B12 pueden estar relacionados con la sequedad y descamación, pues, esta vitamina influye directamente en el metabolismo celular, lo que incluye su cicatrización y recuperación. En casos graves, su déficit puede llevar incluso a provocar úlceras bucales.
La deficiencia de vitamina C también puede llegar a provocar sequedad labial, aunque la verdad es que, no debemos preocuparnos demasiado porque es muy poco frecuente y suele venir acompañado de otros síntomas graves.
Una solución sencilla ante estos problemas es consumir suplementos nutricionales, especialmente aquellos cargados de vitaminas y minerales. Aunque también podemos recurrir a aumentar el consumo de frutas, verduras y proteínas.
Medicamentos
Algunos medicamentos pueden llegar a provocar sequedad labial como un efecto secundario. Especialmente aquellos utilizados para tratar el acné, pues, recordemos que este trastorno de la piel se produce por la sobre producción de grasa por parte de las glándulas sebáceas. Y a pesar de que los labios no tienen esta capacidad, las zonas cercanas sí lo hacen, y usualmente son las responsables de mantenerlos hidratados.
Algunos analgésicos, antialérgicos, antibióticos, antidepresivos y quimioterapia pueden también resecar los labios.
Si crees que la medicación es la responsable de la resequedad de tus labios, puedes comunicárselo a tu doctor y consultar la posibilidad de usar una alternativa que no produzca este efecto secundario.
¿Cómo evitar que los labios se pelen?
Después de conocer cuáles son las causas más frecuentes que están provocando la descamación y resequedad de tus labios, es momento de conocer algunos métodos y consejos para evitar este problema.
No rasques tus labios
Es muy difícil resistirse a la tentación de arrancar las escamas y la piel muerta de tus labios, pero en realidad esta acción puede estar influyendo en el problema.
Los pequeños pedacitos de piel que están en tus labios, están formados por células muertas en su mayor parte, pero estas aún se encuentran unidas en una pequeña proporción a piel sana, por lo que al arrancarlas también nos llevaremos consigo parte de piel en buen estado, lo que ayudará a empeorar el problema.
Estos pequeños fragmentos de piel muerta realmente están allí para beneficiarte, ya que se encargan de proteger la nueva y delicada piel, mientras madura lo suficiente para exponerse ante las condiciones del entorno exterior.
Identifica los factores desencadenantes del problema y evítalos
Los alérgenos e irritantes de ciertos alimentos, así como productos tópicos e incluso algunos labiales, pueden ser el origen del inconveniente.
Es por esta razón que lo mejor es apuntar cuáles han sido los alimentos que se han consumido antes de que sucediera el problema o cuáles son los productos que se usaron previo a la resequedad y despellejamiento de los labios. En caso de que tengamos sospecha de alguno de ellos, podemos hacer una prueba del parche o visitar un alergólogo.
En otras ocasiones, el aire frío y seco será el responsable, por lo que si debemos pasar tiempo al aire libre, podemos optar por cubrir los labios con una máscara, balaclava o bufanda.
Haz de la exfoliación una rutina
Exfoliar suavemente los labios es una forma excelente de deshacerte de la piel opaca y seca, mientras le das camino libre a los productos hidratantes para que su penetración sea más fácil.
Sin embargo, la piel de los labios es muy delicada y fina, por lo tanto, debes tener muchísimo cuidado al exfoliar la zona; hazlo con mucha suavidad y delicadeza.
La recomendación de los expertos es utilizar un producto exfoliante que sea amigable con tu piel y que además tenga una base hidratante. Así podrás fortalecer la barrera cutánea mientras eliminas la piel muerta; esto quiere decir que nada de productos con grumos gruesos y de bordes filosos.
Una mezcla de ingredientes hidratantes como la glicerina, el aceite de jojoba, de coco o el escualeno es una buena idea, junto a cristales pequeños de azúcar son una buena idea.
Evita el contacto con aquellos ingredientes que resecan tus labios
Los productos que pones en tus labios son tan importantes como aquellos que sí aplicas. Evita por completo los bálsamos que contienen mentol, alcanfor, fenol y alcohol. Pueden resultar muy refrescantes al aplicarlos, pero se evaporan muy rápido, por lo que terminan dejando los labios aún más secos.
El ácido salicílico es un magnífico aliado para el cuidado de la piel, pero cuando se aplica en productos labiales, como exfoliantes, pueden llegar a provocar irritación, especialmente si tu piel es sensible.
Pero los bálsamos no son los únicos responsables, en ocasiones los humectantes labiales también pueden contribuir al problema. Asegúrate que tanto los productos de cuidado como el maquillaje que utilices no contienen ingredientes potencialmente secantes o irritantes; canela, menta, alcohol, etc.
Añade aceites e hidratantes labiales
El verdadero truco para detener la descamación de los labios es precisamente evitar que se produzca, por lo que mantenerlos nutridos será clave. Utiliza un bálsamo labial que contenga ácido hialurónico y glicerina para hidratar los labios.
Los emolientes, como las ceramidas, también serán una excelente apuesta, ya que podrán reforzar la barrera cutánea y ayudar a fijar la hidratación. Puedes aplicar este bálsamo después de exiliarse los labios o cada vez que sientas que están algo secos. Aunque por lo general, se recomienda usar unas 3 a 5 veces al día.
¿Nada ha funcionado? Es momento de la artillería pesada
En caso de que hayas probado todos los conejos y aún tengas problemas de descamación labial, puede que sea momento de ponernos más serios en el asunto y aplicar corticosteroides tópicos. Una buena opción es la hidrocortisona al 1%, es muy segura, de venta sin receta médica y te ayudará a aliviar la inflamación.
Puedes emplear ta pomada dos veces al día durante al menos una semana, pero debes acompañarla con bálsamos hidratantes. Esto debería ser suficiente para brindarte un alivio al problema.
Aunque si sigue sin haber una mejoría, entonces programa una visita al dermatólogo y obtén una ayuda personalizada a tu caso.
¿Cómo establecer una rutina de cuidado para los labios?
Probablemente ya tus labios han vuelto a estar suaves, tersos y bastante bonitos. Por lo que es momento de crear una rutina que te ayude a mantenerlos así siempre.
- La hidratación debe ir desde el interior: los labios pueden agrietarse y secarse con mucha facilidad ante la deshidratación, por lo que, por supuesto, será necesario mantener niveles adecuados de hidratación durante todo el año. Bebe mucha agua, come frutas y verduras con un contenido elevado de agua, etc.
- Exfoliación semanal: deshacernos de la piel muerta de los labios también es fundamental. Podemos optar por hacerlo semanal para mantener los labios libres de piel seca y escamosa durante todo este tiempo. Además, te ayudará a que los productos hidratantes penetren mejor y los labiales se fijen mejor.
- Protección e hidratación constante: ya sabemos que el aire frío, el calor extremo, el sol y el viento seco son factores que contribuyen enormemente a la resequedad y el agrietamiento. Por lo que podemos aplicar aceites naturales o productos hidratantes a lo largo del día para evitar que pierda hidratación, de esta forma estarán suaves, flexibles y protegidos del agresivo entorno exterior.
Cuidar los labios no es tan difícil como parece, pero al ser muy delicados, es necesario tener mucha constancia. De esta forma podrás lucir los labios carnosos, suaves y jugosos que tanto deseas.