¿Qué es el aceite de almendras y qué beneficios tiene para tu pelo?
Un aceite lleno de propiedades beneficiosas para el pelo, especialmente los más rebeldes.
El aceite de almendras es especialmente conocido por sus propiedades para la piel, hidratando, calmando la irritación e incluso previniendo las estrías o al lograr reducir la apariencia de las ojeras. Sin embargo, su potencial no se queda allí, ya que también es un producto bastante interesante cuando se trata del cuero cabelludo y el pelo.
¿Qué es el aceite de almendras?
Se trata de un producto oleoso que se extrae de las almendras maduras, por lo general dulces. Para su obtención se prensan las nueces, extrayendo así el aceite sin refinar. Aunque también es posible hacerlo moliendo las almendras o mediante calor y ciertos productos químicos.
En cualquier caso, el aceite de almendras es un extracto rico en vitamina E y antioxidantes. Entre las grandes propiedades del aceite de almendras, la acción antiinflamatoria es una de las que más destaca, ayudando a calmar la irritación del cuero cabelludo, proteger las hebras del pelo de la radiación solar o brindarle una barrera de hidratación a la melena.
Beneficios del aceite de almendras
El aceite de almendras es un elixir cargado de vitaminas y minerales que se pueden aprovechar con el uso frecuente, por lo que al incorporar este ingrediente a nuestra rutina de belleza podremos observar:
Cabello más suave que nunca
Este compuesto oleoso es emoliente, esto quiere decir que es capaz de rellenar los orificios del pelo a nivel celular, reduciendo las variaciones microscópicas en la estructura de la hebra capilar.
El uso frecuente y prolongado del aceite de almendras en el pelo proporciona una textura más suave. Además, especialmente en las melenas más rebeldes, después de incorporar esta sustancia a la rutina de cuidado del cabello es posible notar cómo el pelo se vuelve más fácil de desenredar y peinar.
Melena extrafuerte y libre de daño
El empleo del aceite de almendras ha demostrado ser capaz de disminuir la tendencia a las roturas y puntas abiertas en las melenas más maltratadas. Esto es posible gracias a las propiedades lubricantes que brinda el aceite de este fruto seco, el cual es capaz de disminuir de forma importante la fricción durante el peinado.
De hecho, algunos estudios sugieren que el aceite de este fruto seco, gracias a su contenido en Omega 3, 6 y 9 brinda una mejoría considerable en lo que respecta a la resistencia de las fibras capitales.
El aceite de almendras podría favorecer el crecimiento del pelo
Si bien es cierto que no existen ensayos clínicos que demuestren la capacidad del aceite de almendras para hacer crecer el cabello, debemos tener en cuenta que este aceite es capaz de brindarle resistencia y reducir las puntas abiertas, esto se traduce directamente en un crecimiento libre de inconvenientes, es decir, que no se ralentizará debido a la pérdida de pelo.
Igual de interesante, el aceite de almendras contiene cantidades valiosas de vitamina E, un antioxidante que se ha demostrado que tiene una potencia similar a la vitamina C, por lo que es capaz de combatir el estrés oxidativo y lograr que las fibras capilares sean más sanas y tengan una apariencia más joven.
Además, este aceite es rico en vitamina B7 (una de las muchas vitaminas que cuidan el pelo), la cual se encarga de engrosar la fibra capilar, mientras al mismo tiempo nutre el folículo y fomenta la producción de queratina. Esto último podría tener una interacción positiva en cuanto al crecimiento del pelo.
Un cuero cabelludo libre de afecciones
Las principales propiedades del aceite de almendra están relacionadas con su poder antiinflamatorio, es por ello que es un tratamiento efectivo ante la dermatitis seborreica y la psoriasis. Sin embargo, es necesario resaltar que aún no existen estudios de rigor científico que sean capaces de explicar cómo el aceite de almendras es capaz de brindar alivio a estas afecciones.
Pero a pesar de la “falta de evidencia”, ese aceite ha formado parte de la medicina china e india durante siglos como un eficiente remedio para diferentes problemas relacionados con el cuero cabelludo.
Se cree que esta propiedad se debe al aumento del flujo sanguíneo en la zona donde se aplica el aceite de almendras, lo cual, junto al ingreso de los potentes antioxidantes del aceite, brindan una mejoría casi inmediata.
Por otro lado, lo que sí se sabe es que el aceite de almendras es una sustancia antibacteriana, por lo que puede ser usada perfectamente en aquellos que sufren de caspa, ya que inhibe el crecimiento de las levaduras que provocan la patología.
¿Qué consideraciones debo tener presentes al usar aceite de almendras para el pelo?
A diferencia de lo que ocurre con otros aceites más intensos y pesados, como el aceite de coco o de argán, o los muchos otros aceites para el pelo que existen, el aceite de almendras es mucho más versátil, adaptándose perfectamente a la mayoría de tipos de cabello, desde gruesos y rizados, hasta los finos, lisos u ondulados.
Sin embargo, el pelo encrespado y rebelde es uno de los biotipos que más se beneficia de la aplicación del aceite de almendras, especialmente en las puntas muertas.
Por el contrario, se debe tener en cuenta que después de utilizar este aceite en el pelo fino, probablemente se tenga una sensación grasa o de pesadez. Para evitarlo, nuestra recomendación es comenzar aplicando solo una o dos gotas en los medios y las puntas justo antes de lavarte el cabello.
¿Cómo usar el aceite de almendras para el pelo?
Es bastante común encontrarse con productos que contengan el aceite de almendras entre sus principios activos hidratantes, especialmente cuando se tratan de champús, acondicionadores, mascarillas o cremas para peinar. Y es que la relación “nutrición/precio” es tan interesante que también se vuelve ideal para usarse como un tratamiento capilar casero.
Después de conocer sus propiedades, probablemente te has sentido tentada a aplicarte una mascarilla capilar de aceites de almendras y dejarla actuar mientras te relajas viendo una película. Pero esto podría ser un poco contraproducente, especialmente cuando se ha aplicado una cantidad bastante generosa.
Si dejamos el aceite de almendras durante mucho tiempo en el pelo, este podría endurecerse y terminar recubriendo las cutículas. Además, aplicarlo en gran cantidad, al igual que cualquier otro producto, podría hacer que el pelo pierda su estado y brillo natural. Mientras que la acumulación de producto podría aumentar su tendencia a enredarse.
Para evitar que la aplicación del aceite de almendras sea un problema, te mostramos algunas formas de introducirlo a tu rutina de cuidado capilar sin morir en el intento.
- Aceite capilar: el aceite de almendras aporta un brillo sin igual y es capaz de dominar hasta el pelo más rebelde en cuestión de segundos. Te recomendamos aplicar un par de gotas de aceite de almendras sobre la palma de tus manos, después frota la una contra la otra y posteriormente distribuye el aceite de forma uniforma por todo tu cabello mientras lo esparces longitudinalmente.
- Tratamiento para la piel escamada: los problemas inflamatorios, como la psoriasis, son un mal del pasado gracias a las propiedades naturalmente calmantes del aceite de almendras. Si tenemos el cuero cabelludo irritado, podemos mezclar el aceite de almendras con un poco de aceite de manzanilla y aplicar esta combinación sobre el cuero cabelludo. Algunos profesionales señalan que, en caso de tener caspa, añadir un poco de limón a la mezcla y aplicarla antes de lavarse el pelo es una buena idea.
- Aceite para masaje relajante del cuero cabelludo: pocas cosas son mejores que un buen masaje, especialmente cuando le añadimos nuestro toque personal. El aceite de almendras es capaz de aliviar la tensión mientras al mismo tiempo nos valemos de su propiedad para favorecer la penetración de otros productos de cuidado capilar para lograr una nutrición completa. Nuestra recomendación es aplicar el aceite de almendras en el cuero cabelludo apoyándonos en un masajeador eléctrico, todo ello justo antes de lavar el pelo.
- Tratamiento capilar de lavado definitivo: si tu cabello no se encuentra en su mejor momento y quieres devolverlo a la vida, puedes cambiar el aceite de almendras con un poco de aceite de oliva para crear el tratamiento capilar más adecuado para el pelo dañado y quebradizo, sobre todo cuando la génesis del problema es el peinado con calor, la coloración o la decoloración. Simplemente peina tu cabello con esta mezcla casera y podrás beneficiarte de todas sus propiedades.
Sin dudas el aceite de almendras es un excelente aliado para brindarle el cuidado que tu pelo se merece, sin embargo, es necesario que sepas aplicarlo correctamente para evitar sobrehidratar tu melena y desperdiciar todas las propiedades que esta sustancia tiene para ofrecer.